El Grupo Chery, un gigante automovilístico chino, fabricará sus coches en la antigua planta de Nissan en la Zona Franca de Barcelona. Para hacerlo posible, ha firmado un acuerdo junto con una olvidada (y querida) marca española que producía vehículos industriales y agrícolas.

El papel de este fabricante en la operación ha sido fundamental, ya que pertenece a la propietaria de las instalaciones barcelonesas, EV Motors. Hablamos de Ebro-EV Motors, una compañía que se remonta a 1954 y que nació bajo el paraguas de Motor Ibérica S.A., anteriormente Ford Motor Ibérica S.A. Sí, se podría decir que Ebro tiene cierto origen americano.

Su razón de existir fue gracias a un concurso público del Ministerio de Industria para impulsar la presencia de tractores en España. Este se concedió a Motor Ibérica S.A., lo que supuso una oportunidad para empezar a producir este tipo de vehículos con el nombre de Ebro.

Concept de la pick-up de Ebro-EV Motors.

Su éxito comercial hizo que se desligara de Ford en 1965, si bien Massey Ferguson adquirió el 40% de la entidad y le proporcionó los motores Perkins. Años más tarde, en 1979, llegó Nissan a España y compró la mayoría de las acciones de la empresa.

Esto provocó que la planta solo fabricara modelos como el Nissan Patrol y el Nissan Vanette, así como los vehículos de Ebro con el logo de la firma nipona. Finalmente se creó Nissan Motor Ibérica S.A. en 1987, año en el que la marca española desapareció.

Una joint venture

El acuerdo entre Ebro-EV Motors y el Grupo Chery se ha firmado de manera oficial el 19 de abril en la planta de la Zona Franca de Barcelona, cerrando una joint venture participada mayoritariamente por Ebro. No obstante, la alianza ha llevado meses de negociaciones y el trato se cerró en Wuhu (China), con Zhang Guibing Executive Vice President de Chery Automobile

Al acto en Barcelona han asistido el presidente de España, Pedro Sánchez; el president de la Generalitat, Pere Aragonès; el ministro de Industria, Jordi Hereu; el conseller d’Empresa i Treball de la Generalitat, Roger Torrent; y representantes de la Embajada y el Consulado chino en España y de la provincia de Anhui (China), además de otras autoridades y más de un centenar de invitados.

Firma del acuerdo entre Ebro-EV Motors y el Grupo Chery.

Apuesta por los eléctricos

Tras 37 años desaparecida, Ebro-EV Motors renace con la estrategia de lanzar vehículos eléctricos. Los acuerdos de joint venture contemplan dos partes. Por un lado, se ha creado la división Ebro SUV, destinada a la comercialización y posventa de todocaminos en el mercado español y andorrano (y más adelante otros países). En una primera fase, estos modelos se ensamblarán y luego pasarán a la cadena de producción de la planta de Zona Franca.

Por el otro lado, el segundo acuerdo incluye la inversión del Grupo Chery en la planta (que de ahora en adelante se llamará Ebro factory) y tendrá como finalidad la fabricación de modelos de las dos firmas automovilísticas.

La denominada Ebro Factory empezará su actividad en el cuarto trimestre de este año, con la producción de los modelos Omoda 5 del gigante chino. Este SUV de tamaño medio se comercializará con una versión de combustión y otra eléctrica pura.

Omoda 5.

A finales de año, llegarán dos modelos SUV de Ebro, con variantes híbridas enchufables (PHEV) y térmicas. Estarán construidos sobre una plataforma compartida con Chery, cuya producción total prevista para el 2029 es de unos 150.000 vehículos. Esta estimación irá creciendo hasta la plena ocupación de la fábrica.

En cuanto a la distribución, se establecerá una red de concesionarios que, en el momento del lanzamiento, contará con 30 puntos de venta, así como con las instalaciones de posventa necesarias para brindar un servicio completo.

Creación de empleo

La llegada del Grupo Chery a España y su acuerdo con Ebro-EV Motors supondrá la incorporación de unos 150 trabajadores en los próximos meses, que ahora se encuentran contratados bajo la modalidad de formación (con financiación de la Generalitat de Catalunya). La finalidad es asegurar los empleos de la bolsa de reindustrialización a medida que se asignen las líneas de producción.

Concept de la pick-up de Ebro-EV Motors.

En una fase inicial y para acelerar el arranque de las operaciones industriales, la fabricación de los modelos se llevará a cabo mediante DKD (Direct knock down), es decir, se ensamblarán en la fábrica, si bien el objetivo es que en un futuro próximo se pase a un modelo CKD (Complete knock down), utilizando las instalaciones de soldadura, pintura y montaje. En esta segunda fase se contempla la progresiva incorporación de proveedores locales.